La astrología mantiene una dura confrontación con la ciencia desde hace muchísimo tiempo. Cuando se habla de la influencia de los astros en el comportamiento humano y en los acontecimientos, en principio, resulta absurdo y pareciera que no queda mucho más por decir.
No se trata de gurús o fanáticos de alguna secta, sino de filósofos, antropólogos, físicos y químicos, entre otros. De hecho, el famoso Carl Jung fue un asiduo consultante de la carta astral.
Para Jung, en la astrología están condensados todos los conocimientos de psicología de la antigüedad. De manera intuitiva, los doce signos del zodiaco se convirtieron en un compendio de las realidades psíquicas. Configuran lo que Jung llamó “arquetipos”. Estos son patrones o modelos psicológicos, que habitan en el inconsciente colectivo.
Hay, sin embargo, un estudio al que muchos astrólogos hacen alusión para darle algo de soporte científico a sus planteamientos. Se trata de un experimento llevado a cabo por la Universidad de Vanderbilt en 2010.
La evidencia es ciertamente limitada. Refiere a un experimento con un grupo de ratones, en el que se detectó que estos tenían conductas diferentes en función de si habían nacido en verano o en invierno. Los que nacían en esta última estación eran más lentos; la fisiología era diferente en unos y otros, por lo cual también lo era su temperamento.
Todos somos energía. La astrología psicológica funciona a partir de la energía con que estamos fusionados al nacer, no solo por el signo zodiacal que ya conocemos, sino por los planetas y las relaciones angulares entre ellos.Si reconocemos la naturaleza de nuestra composición energética, lograremos utilizar nuestros recursos de una forma más creativa y positiva, es decir cómo hacer conscientes nuestros patrones inconscientes.
Un ejemplo sería la persona con una concentración muy fuerte de energía neptuniana en su carta natal, mal canalizada, es común que no pueda conseguir pareja porque temen ser traicionadas, y es que inconscientemente tienen una atracción hacia ese tipo de personas, es la que en una consulta te dice que siempre le tocan parejas que son infieles.
La gran parte de nuestros conflictos psicológicos se solucionan siendo conscientes, por eso la astrología le tiende una mano fuerte a la psicología, es otra herramienta maravillosa para ir descubriente y ayudándo a disolver mecanismos subconscientes que no nos dejan fluir.
